“Noches de flamenco en Buenos Aires" en el Teatro Astral, dirigida por Jorge Mazzini, ofrece con gran acierto su homenaje a un género que goza de perenne atractivo para el público local, pero que aún en su propia tierra, Andalucía, encuentra divididas las posturas de sus cultores acerca de si son convenientes o no, deseables, o simplemente admisibles las innovaciones, cruces, o   aggiornamientos de cualquier índole en las puestas en escena de los espectáculos flamencos.  

En vista de esto, podría extrapolarse que, quizás, un público local “purista u ortodoxo” (si existe tal postura en nuestro país) se sintiera bastante desconcertado cuando en el cuadro de apertura la bailaora se presenta envuelta en un traje de material plástico, transparente, y el ballet que la acompaña, abanicos en mano, pareciera estar participante de una performance integrada por poses y figuras del flamenco altamente estetizadas, en lugar de la esperada danza gitana. 

 ¿Intención provocada o rupturista la de Mazzini? Tanto lo uno como lo otro parecen confirmarse en lo que concierne al vestuario en general: faldas con transparencias, pantalón y blusa para el ballet Palma y Tacón - de innegable profesionalismo y experiencia, por otra parte. Un vestuario enteramente en colores negro y rojo, que solo de tanto en tanto se permite el blanco – como en el tema Campanas de olvido, que permite un gran lucimiento de la bailaora Jorgelina Amendolara, o para los temas que ejecuta el cantante Baldomero Cadiz con su voz gitana y rasposa, entre los que se destaca Potro de rabia y miel, un homenaje a Camarón de la Isla, máximo exponente del cante flamenco.  

 

Es interesante destacar que sin lugar a dudas, le cabe a Cadiz la responsabilidad de aportar a la escena la impronta de autenticidad del género secundado por el cantaor Eugenio Romero y la Banda flamenca compuesta por guitarras, flauta traversa, cajón, voz y palmas. Cádiz, nacido en Canarias y residente hace años en Argentina, fue el fundador y voz del grupo Los Tarantos y es cantante, guitarrista, bailarín y director de espectáculos de flamenco con una gran trayectoria. De él se ha dicho: “Los Cádiz son una de las familias de gitanos más arraigadas en la Argentina. y una de las más talentosas a la hora de mostrar su herencia flamenca sobre los escenarios nacionales.”

 A todo lo anterior es imprescindible sumar la actuación del bailaor invitado, Gastón Stazzone, que junto a Yamil Rabaj y Cecilia Crespo despliega sobre el escenario la emoción y nostalgia de las bulerías y las seguiriyas, farrucas, alegrías y fandangos. Finalmente, además de una escenografía minimalista, otro elemento novedoso de la puesta es el lumínico, un cargo de Paco Urdiales, que junto con la coreografía de Luque, Amendolara y Rabaj aciertan en dotar de misterio y magnetismo a la propuesta.

 

En suma, es probable que el éxito obtenido por Noches de Flamenco en Buenos Aires, evidenciado en sus presentaciones a sala llena, se deba a que el espectáculo resulta evocador de una multitud de recuerdos y sensaciones para una parte del público, y convocante tal para gran cantidad de nuevos espectadores, amantes del género, quizás menos experimentados, pero que se entusiasman frente a las nuevas propuestas como la transgresora de Mazzini. Esto sin duda dividirá las opiniones, pero no se podrá negar al fin y al cabo, que el creador y director ha hecho un intento de conectar al flamenco con las expresiones culturales más contemporáneas, asumiendo valientemente los riesgos que eso conlleva.   

 

En el Teatro Astral. AV. Corrientes 1639  Capital Federal  -  Buenos Aires  - Argentina 

Teléfonos: 4374-5707 / 4374-9964 Web: http://www.teatroastral.com.ar Entradas desde: $ 250,00 – Viernes y Sábados - 20:00 hs - 
 

Fotos: María de los Ángeles Loiacono

Por Olivia Ávila (Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.) Octubre 2015

 

 

 

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